Escándalo en Juegos Olímpicos
Paris, Francia | Redacción
El duelo de fútbol entre Argentina y Marruecos terminó en un caótico espectáculo de violencia y desorden, con petardos, botellazos y una invasión de cancha por parte de varios aficionados.
La decisión arbitral de otorgar 15 minutos de compensación, en los que la Albiceleste logró el empate 2-2, desató la furia de los asistentes. Los jugadores argentinos, dirigidos por Javier Mascherano, corrieron al vestidor para resguardarse mientras los agentes de seguridad luchaban por controlar a los fanáticos marroquíes que se colaban por los cuatro costados del Estadio Geoffroy-Guichard de Saint-Etienne.
El incidente más alarmante ocurrió cuando un petardo explotó cerca de la banca argentina, un hecho que quedó grabado en la transmisión internacional, mostrando a los jugadores visiblemente asustados.
Marruecos lideraba con goles de Soufiane Rahimi (45′ y 50′), y aunque Giuliano Simeone redujo la diferencia al 67′, el ambiente se tornó tenso y violento. La polémica decisión del árbitro sueco Glenn Nyberg de conceder 15 minutos de compensación, una medida inusual, encendió los ánimos. Cristian Medina anotó el empate en el minuto 15 con 24 segundos de compensación, provocando la invasión del campo, sin embargo, increiblemente dos horas después, tras analizar la jugada en el VAR se determinó anular el segundo tanto de los albicelestes y dejar el marcador 2-1 a favor de Marruecos.